Este año, el XXIII Congreso Nacional de Ingeniería Comercial (Concaic) tuvo como infitrión a la Universidad del Bío- Bío, que recibió a unos 200 estudiantes de 17 universidades de todo Chile.
“Como parte de la organización, tuvimos problemas y situaciones críticas, pero estuvimos trabajando en equipo hasta el final, lo que nos permitió darnos cuenta de lo capaces que somos y lo gratificante que es poder dar por realizado con éxito un proyecto de esta envergadura, para la comunidad”. Así lo relató Fernanda Arteaga, quien fue parte de este comité organizador.
La actividad de carácter nacional convocó a estudiantes de Ingeniería Comercial de universidad de norte a sur del país. Entre ellas, la Arturo Prat, de Iquique, la Universidad Católica del Norte, Universidad de Antofagasta, Universidad Santo Tomás de La Serena, Universidad Tecnológica Metropolitana, Universidad Central, Universidad de Concepción, de sus tres sedes, (Chillán, Concepción y Los Ángeles), Universidad Católica de la Santísima Concepción, Universidad de Valparaíso, Universidad de Las Frontera, Universidad Austral de Chile Valdivia, Universidad Austral de Chile Puerto Montt, Universidad de Los Lagos, Universidad Católica de Temuco, Universidad de La Serena.
El Congreso abordó con expositores de primer nivel los seis principales pilares de la ingeniería comercial, que son Recursos Humanos, Economía, Responsabilidad Social Empresarial, Finanzas, Marketing y Emprendimiento e Innovación.
Asimismo, se realizaron más de 20 talleres de creación de contenido, coaching, emprendimiento, dividiendo en grupo a los alumnos para trabajar y conocerse, cuenta Fernanda Arteaga….
El día jueves, día de la inauguración que se realizó en el Espacio Marina, expuso Margarita Celis, presidenta de la Corporación Chilena de Madera (Corma) Biobío-Ñuble, quien dio una charla sobre de Recursos Humanos; Felipe Henríquez San Juan, jefe de Gestión Ambiental en Masisa, que entregó su visión sobre Responsabilidad Social Empresarial.
El segundo día de actividades, partió con sendas e inspiradoras charlas de Jorge Kuncar, co-founder y CEO de Vilay, Founder DK Group Inversiones, que expuso materias relacionadas con las Finanzas, y Johana Fernández, gerente de Operaciones en Working Place, a quien correspondió hablar sobre Marketing, las que se concentraron en el Paraninfo de la Universidad del Bío-Bío.
Y, en el Aula Magna, se cerró el ciclo de charlas, con Francisco Ackerman, experto en Finanzas, Influencer en Educación Financiera, quien expuso sobre Emprendimiento e Innovación; Omar Aguilera, experto en marketing digital y creación de contenido, y Jeannette von Wolfersdorff, primera mujer en formar parte del directorio de la Bolsa de Comercio de Santiago, co- founder de la Fundación Observatorio Fiscal y autora de “Capitalismo, una historia de innovación, inversiones y ser humano”, contenido que compartió en su charla sobre Economía.
“Fue una oportunidad de aprendizaje para cada uno de los que estuvimos en el equipo, nos sentimos como verdaderos profesionales, buscando auspicios como Red Bull, Vilay, Awafresh, Transbank, Banco de Chile, entre otras”, dice Fernanda, encargada de Difusión del encuentro.
La Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad del Bío-Bío, FACE, felicita a todos los futuros ingenieros comerciales y en particular a los 16 estudiantes, que formaron parte del comité organizador: Fabiana Paz Zapata Gómez, Nicolás Francisco Martínez Neira, Natalia Andrea Bravo Sánchez, Katherine Javiera Figueroa Villa, Tiare Tamara Román Alarcón, Sebastián Benjamín Silva Díaz, Benjamín Fernández Navarro, Javiera Alejandra Constanzo Belmar, Ignacio Antonio Cartes Carrasco, Darlyn Ignacia Aguayo Escalona, Fernanda Ignacia Arteaga Muñoz, Alexander Maximiliano Muñoz Araneda, Camila Belén Coloma Soto, Ayleen Constanza Vega Valenzuela, Jenipher Riquelme Gutiérrez y Camila Antonia Petermann Valdés.
Durante este mes se definirá la universidad que a la que corresponderá organizar el próximo Congreso.
Finalmente, las conclusiones de este XXIII Congreso de Nacional de Ingeniería Comercial son muy positivas, no solo por los aprendizajes obtenidos, sino por la fraterna y sana convivencia que se produjo y que se dio también en las actividades recreativas que se compartieron. “Las opiniones de las universidades asistentes fueron muy alentadoras, todos compartieron sus experiencias por nuestras redes sociales etiquetándonos en sus historias, y compartiéndonos sus vivencias que, para la gran mayoría de los participantes, fue maravillosa”, cerró Fernanda Arteaga.
